sábado, 28 de abril de 2012

Fotografía de la revista Proceso


Heridas en Monterrey



La tormenta tropical Alex  tocó tierra el jueves 29 de julio de 2010, en la madrugada; sobre el Golfo de México, golpeando al estado de Tamaulipas. Así fue como se soltaron las lluvias y provocaron la crecida de arroyos y ríos, hasta que uno de ellos se desbordó, el Santa Catarina. Éste arrancó pedazos de una carretera que corre en paralelo y destrozó los puentes.

Aquél hombre fue testigo del poder de la naturaleza. Es notoria su impotencia, tristeza y miedo ante tal autopista deshecha, con un profundísimo hoyo, y mezclada con sus restos, que dejan ver cómo puede el planeta desquitarse y romper nuestras cosas como débiles cristales. La persona detuvo el paso para observar la gran transformación: de algo servible, a sólo gritas y escombros.

Hubo seis fallecidos, 7000 personas evacuadas, gente sin agua potable ni energía eléctrica. Fueron 30 las comunidades afectadas.

Es muy triste ver el poder de la naturaleza, ya que a su paso deja una estela de desgracia. ¿Qué puede hacer un ser humano ante esto, sobre todo alguien como quien aparece en la fotografía? Es muy obvia su pobreza: pantalones desgastados, camisa rota, días de no rasurarse y aspecto de no haberse bañado.

La botella, fue posiblemente arrastrada por la desbordada Santa Catarina, y el bote azul marino, sería para recoger los destrozos. Las piedras fueron testigos de toda la destrucción.

A la zona llegaron 1200 soldados del plan DN-III para aplicar las Fuerzas Armadas.

Los daños superaron al igualmente devastador huracán Gilberto de 1988.

1 comentario:

  1. la foto es grandiosa, al igual que tu ensayo ya que supiste meter la información con la descripción y corregiste los errores que habiamos dicho en clase.

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